Tienes un sueño, y ese sueño tiene que ver con dejar de trabajar por cuenta ajena y comenzar tu propio proyecto, que te permita estar más tiempo en casa, conciliar, ver crecer a tus niños..
Hoy en día la web 2.0 nos abre las puertas al mundo y nos ofrece muchas posibilidades, seguro que hay algo que se nos da muy bien hacer y podemos ayudar a otras personas, trabajando para ellos, estén donde estén. Es lo bueno de convertirse en “infoemprendedor”, que no se requiere una gran inversión para comenzar, podemos intentarlo teniendo simplemente un portátil y una buena conexión a internet.
Seguro que has oído hablar de casos de éxito de personas que comenzaron a escribir un blog por afición y ahora tienen un negocio rentable por internet. ¿Por qué no lanzarse? Ya en el artículo de anterior te hablaba de la cantidad de oportunidades que existen y cómo eliminar los miedos que puedes tener al principio, (puedes leerlo aquí)

Quizá empieces a escribir el blog sobre algo que te apasiona, que es tu hobby o se te da muy bien hacer, (cocina, costura, fotografía, artesanía, manualidades, bisutería, cuentos, crianza..etc.). Al principio ya tienes suficiente tarea con aprender los aspectos técnicos básicos y desarrollar tu escritura creativa, ya que quizá sea la primera vez que haces estas cosas.
Puede que alguna vez escuches algo sobre legislación en el mundo online pero no piensas ni por asomo que eso te pueda afectar a ti, ya que sólo escribes un blog y no tienes una empresa.. Pero, ¿tienes en tu blog un cajetín de suscripción donde tus seguidores dejan sus emails para que les escribas contando novedades? ¿De vez en cuando te salen pequeños encargos que te proporcionan un dinerillo extra? Pues has de tener cuidado con los aspectos legales.
Lo mejor es hacer las cosas bien desde el principio y no tener sustos que echen por tierra tus sueños. Es cierto que la información a veces es escasa y difícil de entender, razón por la cual muchos blogs o páginas webs, (algunos con mucho nombre o incluso algunos de instituciones públicas) no cumplen los mínimos, pero muchas veces se debe a puro desconocimiento, aunque ya sabes que “el desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento”.
Así que antes de seguir el ejemplo de otros a los que les ha ido muy bien hasta ahora mejor ponerse las pilas y no poner en riesgo tu trabajo, ¿verdad? Y si aún no estás convencido aquí de doy tres razones imbatibles:
1. Para dormir tranquilo
El no hacer las cosas bien puede derivar en que te exijan responsabilidades. Vayamos al grano: en España tenemos una de las leyes más restrictivas del mundo en lo que se refiere a protección de datos personales, y los incumplimientos pueden derivar en sanciones que van desde los 600 a los 600.000 €.
2. Porque tus valores deben prevalecer
Todas las personas tenemos derecho a que se respete nuestra intimidad y a decidir qué se hace con nuestra información personal. Seguro que más de una vez te ha pasado que te has sentido traicionada, has dado tus datos para algo en concreto y tiempo después empiezas a recibir publicidad invasiva, (ya sea a tu email, a tu correo postal, a tu teléfono..), a veces te preguntas ¿cómo esta gente sabe si estoy casada o tengo x hijos? Tú no querrás hacer lo mismo en tu emprendimiento porque tus valores están por encima de esas malas prácticas.
3. Porque garantizando una buena gestión generas confianza.
Si reflejas tu ética profesional en tu blog o web y garantizas una correcta gestión esto redundará en una sensación de tranquilidad en las personas que se pasen y se interesen en tu trabajo, y al final, para hacer negocios en internet es vital generar esa confianza, (me encanta la palabra en inglés TRUSTABILITY) para que los interesados puedan llegar a convertirse en tus clientes y tú puedas poco a poco, hacer tu sueño realidad.

Imagen cortesía de Flickr
¿Te animas a empezar con buen pie?

Miriam Escacena
Ingeniera de profesión pero por encima de todo mamá de corazón. Su maternidad supuso un antes y un después en su en su vida, revolucionado sus prioridades y queriendo disfrutar al máximo de la experiencia para crecer como persona y sacar lo mejor de sí misma día tras día.
Le entusiasma la infancia y la educación, y también todo lo relacionado con el aprendizaje y el desarrollo continuo de las personas. Logró juntar sus dos pasiones al fundar web a base de quitarse horas de sueño mientras trabajaba también por cuenta ajena.
Está convencida de que cuando una persona descubre aquello que le apasiona tiene un inmenso potencial para crear su propio proyecto, y para ello se dedica también a acompañar a almas inquietas a lanzarse al maravilloso mundo del emprendimiento online.